Los efectos de las acciones humanas sobre el medio ambiente afectan ya de manera notable el clima en todo el mundo. En sólo 150 años, el hombre ha “logrado” aumentar la temperatura del planeta en casi un grado, proceso que a la naturaleza le toma miles de años. En caso de continuar a este ritmo, serían seis grados de más que la tierra tendría en el 2090 por actos de la humanidad, así lo afirmó Carlos Gay García, Premio Nóbel de la Paz 2007, en la conferencia “Cambio climático, Eventos Extremos y Adaptación”.
Gay, quien también es integrante del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático recordó que el cambio climático causa grandes inundaciones, sequías más poderosas y nevadas más prolongadas en todo el mundo, por lo que es necesario diseñar y llevar a cabo estrategias que detengan o aminoren este impacto en la naturaleza y comportamiento atmosférico planetario.
El también coordinador general del Programa de Investigación de la UNAM, alertó que el incremento en seis grados de la temperatura del planeta provocaría el descongelamiento del Polo Sur y de Groenlandia, y el consiguiente aumento del nivel de los mares entre 4 y 5 metros, y la pérdida de kilómetros de territorio que actualmente son habitados o constituyen núcleos de población en el mundo.
Por su parte, al darle la bienvenida al conferencista, Juan Antonio Ferrer Aguilar, secretario del Ayuntamiento de Centro, recordó que en Tabasco y particularmente en Centro, hemos padecido las consecuencias del cambio climático y calentamiento global, con consecuencias como el aumento de la temperatura, la desaparición de especies, sequías, huracanes e inundaciones que conllevan efectos dramáticos en nuestra calidad de vida.
Ante Gay García, miembro del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, que reúne a científicos en la materia, ponderó el interés del gobierno de Centro por posicionar en la agenda pública el tema de prevención de riesgos y protección civil, como elementos claves para enfrentar las condiciones climáticas extremas que afectan el desarrollo de las comunidades e incluso recrudecen enfermedades como el dengue.
Señaló que la inundación de 2007 –cuyo impacto dio la vuelta al mundo– es uno de los efectos del daño ambiental que hemos provocado, y reconoció que es hora de hablar menos y actuar, de que los programas de protección civil, así como las estrategias para detener el deterioro ambiental no se queden en los anaqueles o los escritorios, sino de “bajar la información a ras de tierra” para que todos asumamos la corresponsabilidad que nos toca.
Ferrer Aguilar subrayó, que Carlos Gay García es una de las voces más reconocidas en el tema del cambio climático, “sus investigaciones sobre vulnerabilidad y evaluación del impacto de este fenómeno, abordados desde un enfoque multidisciplinario e integral, es una referencia obligada para América Latina y para el mundo”,
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